Día 267, 23/9
Ayer, comimos en casa de mis abuelos en La Unión, ciudad minera y flamenca.
Luego me eché una siesta por que había dormido mal la noche anterior, pero tampoco dormí bien.
Varios sueños que me despertaban antes de la media hora.
Me fui a dar una vuelta, y paseando me acerqué a Cartagena en Bus.
Cené en las 600 con mi familia después que mi tío Pedrín perdiera al parchís y se fuera como alma que lleva el diablo.
Salí a dar una vuelta por el centro de Cartagena a tomar unos refrescos con unos amigos.
Fuimos andando así que se nos hizo las tantas para llegar al centro. Lo pasamos muy bien en varios locales.
Y luego volvimos tranquilamente.
Terminé llegando a las 5, así que aunque no tenía intención cuando llegué me acosté.
Y aunque la cama que hay allí es malísima algo pude descansar.
Hemos comido hoy en casa de mi tío Paco.
Y nos hemos vuelto a Almería.
Ya estoy escribiendo esta entrada desde el portátil, que sin batería parece que se cuelga menos.
Luego me eché una siesta por que había dormido mal la noche anterior, pero tampoco dormí bien.
Varios sueños que me despertaban antes de la media hora.
Me fui a dar una vuelta, y paseando me acerqué a Cartagena en Bus.
Cené en las 600 con mi familia después que mi tío Pedrín perdiera al parchís y se fuera como alma que lleva el diablo.
Salí a dar una vuelta por el centro de Cartagena a tomar unos refrescos con unos amigos.
Fuimos andando así que se nos hizo las tantas para llegar al centro. Lo pasamos muy bien en varios locales.
Y luego volvimos tranquilamente.
Terminé llegando a las 5, así que aunque no tenía intención cuando llegué me acosté.
Y aunque la cama que hay allí es malísima algo pude descansar.
Hemos comido hoy en casa de mi tío Paco.
Y nos hemos vuelto a Almería.
Ya estoy escribiendo esta entrada desde el portátil, que sin batería parece que se cuelga menos.
Comentarios
Publicar un comentario